Paseando por un blog amigo, "veinte caras", encontre este interesante articulo, no me atribullo el merito desde luego, pero alguno tendria que echarle un vistacito:
# El personaje no es un aventurero. Parece una perogrullada, pero no lo es. En muchos juegos, y en Dungeons & Dragons en especial, se asume que los protagonistas son aventureros. Ten siempre en mente que tu personaje debe tener razones para jugarse la vida todos los días. Y no, no puede rechazar la violencia.
# El jugador no sabe cómo es su personaje. Esta es curiosa. Una de las razones para hacer un trasfondo es para saber cómo piensa un personaje para poder interpretarlo. Incluso si tu personaje es muy misterioso e indescifrable, debes entenderlo para poder interpretarlo. Cuando escribas métete (y mete al DM) en su cabeza.
# Descripciones aburridas. He visto descripciones muy pormenorizadas que no dicen absolutamente nada. Trata siempre de describir de golpe, usando el mínimo número de palabras posible. Parafraseando a Dan Simmons: "La boca ancha, expresiva y sensual de Lamia se curvaba en una sonrisa que parecía ser cruel o simplemente juguetona; los ojos oscuros parecían desafiar al observador a que averiguara cuál de esas cosas era."
# El personaje no tiene tramas propias. No hay nada que me desaliente más que no encontrar nada poder poder montar una pequeña aventura basada en el pasado del personaje. Dejar cabos sueltos es muy recomendable: un asesinato sin resolver, un suceso inexplicable o un amante despechado, ¡cualquier cosa!
# El personaje es pasivo. Esto pasa cuando no tiene objetivos que alcanzar. Un aventurero no tiene que tener sólo la motivación de serlo, sino metas concretas que alcanzar como encontrar (y saquear) un determinado dungeon, ganarse la entrada a los Arpistas o desentrañar el misterio de una maldición familiar.
# Mucho que leer, poca chicha. Paradójicamente, aunque juegue a rol por web y escriba y lea blogs, ¡odio leer en pantalla! Parece que cuantas más páginas escribas sobre un personaje, mejor contado está. Nada más lejos de la realidad, ve al grano, o resume los puntos importantes y tu DM te lo agradecerá.
Que opinais? Alguna cosa mas? Hay cientos desde luego...
Fuente:http://veintecaras.blogspot.com/
# El personaje no es un aventurero. Parece una perogrullada, pero no lo es. En muchos juegos, y en Dungeons & Dragons en especial, se asume que los protagonistas son aventureros. Ten siempre en mente que tu personaje debe tener razones para jugarse la vida todos los días. Y no, no puede rechazar la violencia.
# El jugador no sabe cómo es su personaje. Esta es curiosa. Una de las razones para hacer un trasfondo es para saber cómo piensa un personaje para poder interpretarlo. Incluso si tu personaje es muy misterioso e indescifrable, debes entenderlo para poder interpretarlo. Cuando escribas métete (y mete al DM) en su cabeza.
# Descripciones aburridas. He visto descripciones muy pormenorizadas que no dicen absolutamente nada. Trata siempre de describir de golpe, usando el mínimo número de palabras posible. Parafraseando a Dan Simmons: "La boca ancha, expresiva y sensual de Lamia se curvaba en una sonrisa que parecía ser cruel o simplemente juguetona; los ojos oscuros parecían desafiar al observador a que averiguara cuál de esas cosas era."
# El personaje no tiene tramas propias. No hay nada que me desaliente más que no encontrar nada poder poder montar una pequeña aventura basada en el pasado del personaje. Dejar cabos sueltos es muy recomendable: un asesinato sin resolver, un suceso inexplicable o un amante despechado, ¡cualquier cosa!
# El personaje es pasivo. Esto pasa cuando no tiene objetivos que alcanzar. Un aventurero no tiene que tener sólo la motivación de serlo, sino metas concretas que alcanzar como encontrar (y saquear) un determinado dungeon, ganarse la entrada a los Arpistas o desentrañar el misterio de una maldición familiar.
# Mucho que leer, poca chicha. Paradójicamente, aunque juegue a rol por web y escriba y lea blogs, ¡odio leer en pantalla! Parece que cuantas más páginas escribas sobre un personaje, mejor contado está. Nada más lejos de la realidad, ve al grano, o resume los puntos importantes y tu DM te lo agradecerá.
Que opinais? Alguna cosa mas? Hay cientos desde luego...
Fuente:http://veintecaras.blogspot.com/
# El personaje no es un aventurero. De hecho el mio se debate constantemente si todo lo que hace está bien o mal, porque por más que intenta ayudar a la gente e intenta conseguir sus objetivos siempre acaba algo mal, pero ya lo dijo alguien muy sabio, siempre tendrás que escoger el menor de los 2 males.
ResponderEliminar# El jugador no sabe cómo es su personaje. Hay ciertos puntos que desconozco de Reik realmente, pero se mantienen en secreto para desvelar trama más interesante según avanza la partida; de hecho, mi personaje empezó siendo demasiado joven y terminó siendo un hombre de mediana edad medio amargado xD.
# Descripciones aburridas. En este tipo de cosas no soy el amo del mundo, pero me esfuerzo en que me salga algo bien.
# El personaje no tiene tramas propias. Pufff, y más xD.
# El personaje es pasivo. De hecho, ahora mismo los objetivos me sobrepasan demasiado. Tengo que..., matar a Stradh, vengarme de Azalín, cobrar la deuda de vida de mi madre matando a mi padre, eliminar a uno de mis peores y más escurridizos enemigos, Adam, y la lista continua...
Yo la verdad, estoy de acuerdo contigo, aunke yo mismo caiga en algunos, si no en todos, los pecados de los jugadores, pero somos humanos, ke le vamos a hacer.
ResponderEliminarSaludos.
Todos acabamos cayendo en algunos, pero en general tendemos a esforzarnos. Mi personaje de Ravenloft, Mérope, cayó en algunos de ellos por mi mala cabeza e intento corregirme. Me costó avanzar un paso en su historia, buscar nuevas motivaciones cuando acabó en el plano de Ravenloft y profundizar en su carácter, al caer constantemente en el fallo del "autismo", es decir, no relacionarme mucho con el grupo, pero busco avanzar. Aún así busco personajes con historia (aunque reconozco que muchas veces caigo en las mismas ideas, metas, formas de narrar, no sé, un poco de chicha. En verdad odio a la gente que solo busca en el rol un mata-mata, por que no solo insulta al máster (que a veces no sabe como sacar partido a un personaje plano), tambien a los jugadores, pues nos arrastra a los demás.Y para D&D ante todo, SOMOS AVENTUREROS, HÉROES, n o gente normal y corriente.
ResponderEliminarAhora me gustaría exponer algunas ideas relacionadas con el texto anterior, completándolo más defectos. Animaos los demás también, que así reflexionamos y aprendemos todos un poco.
ResponderEliminar- Me hago lo que no soy. Esto se refiere a algo en lo que creo que pecamos todos un poco, en poner en nuestros personajes, aquellas habilidades o rasgos de las que carecemos explícitamente y envidiamos. Eso lleva a que acabemos haciendo personajes con algunas características repetidas (por ejemplo mi obsesión con los elfos, xDD). Pero hay gente que lleva esto al extremo haciendo que todos los personajes sean iguales, y ello resienta la historia y las tramas propias.
El paladín de virtudes. Aquel personaje carente de defectos en todo sentido, lo cual también perjudica a una buena historia, haciéndola normalmente más simple.
El personaje overpower. Variación del punto anterior. A mi personalmente me da más rabia. Es esa gente que solo busca crearse desde un inicio personajes todopoderosos, y para ello se estudia todos los manuales, eligiendo cada dote, poder, habilidad, atributo, etc que le ayuden a hacerse más poderoso. Nunca cogerán nada que debilite a su personaje, aunque ello repercuta negativamente el la historia.
El que se crea todos los personajes iguales. Este punto se extiende a más de un personaje y se basa en aquellas personas que hacen todos los personajes iguales, en todos los sentidos. Ya no es que hagan clones, es que todas sus hojas de personaje son idénticas, incluso copias de la anterior. Además de hacer imposible una buena historia y que sea diferente, estos jugadores intentan meter a sus personajes con calzador en mundo del todo diversos,o trasfondos contrarios, donde a veces la adaptación es del todo imposible, e inverosímil.
¿Qué pensáis vosotros?
Mis ideas ya se basan en partida más que en creación porque no creo que haya más puntos que añadir a lo ya explicado.
ResponderEliminar- Como tengo más fuerza que el resto me como a los jugadores. Esto es algo que pecamos todos, no se refiere a fuerza física, sino que muchas veces se deshecha la idea de alguien o que no se le haga caso a un jugador por el simple hecho de que no nos gusta su personaje o no le damos valor a sus palabras, aparte de faltarle al respeto cuando está hablando saltar alguien y hablar interrumpiendole.
- El cortesano / personaje social: esto es un pecado muy gordo dentro de las partidas, sobre todo cuando una partida está centrada bastante en combate y hay pocas partes para la interpretación, en vez de dejar hablar al personaje social, como creemos que tenemos buena labia y podemos convencer, no permitimos hablar a este personaje pensando que al narrar bien no nos harán hacer una tirada de dados, mientras que este personaje entre labia y tirada de dados nos puede sacar de más de un apuro.
- El piquismo: esta es una regla que en general no me gusta nada, es la regla de porque no me gusta me pico con la gente. Si un personaje te vacila porque el personaje es así o te castiga o te ataca porque es su papel, llevar esto al extremo externo. Es algo que se debería, porque por mucho que pierdas o te fastidie, se hace, en principio, sin maldad.
A ver que os parecen mis ideas.